sábado, abril 11, 2009

Vivir

La vida que soñamos y que no fue. Los sueños que soñamos y que no se cumplieron. La gente por la que apostamos y que nos defraudó. La gente que queríamos y que ya no está.

La vida que parece (es) singularmente injusta y que no logramos comprender. La vida que no logro comprender porque las pérdidas son irreparables, definitivas, absolutas. La vida que me golpeó de pronto y que me deja sin más alternativa que apostar que más hacia abajo no se puede porque ya se tocó fondo. Esa misma vida que hace más de un año me hizo creer que ya pasaba la ola sólo para derrumbarme con un tsunami...

La vida que duele, que cala hasta los huesos, que destruye. Soy más fuerte, sí, pero a qué precio? Si me preguntan preferiría seguir en la ignorancia y creerme débil. Mil veces pensarme débil, pensarme incapaz, imaginarme derrotada. De qué sirve esta vida de fortaleza si perdimos aquello que más queríamos?...