jueves, diciembre 27, 2007

Sobre la condición del inmigrante

Porque uno lee en las noticias estas historias terribles de cosas que pasan con los inmigrantes que tratan de llegar a Europa o la gente que vive en campamentos y se ve todo tan lejano, hasta que te das cuenta -guardando las distancias de que OBVIO que mi situación es mil veces mejor- de que uno también es inmigrante.

Y qué significa no jugar de local? Básicamente que toda tu red de soporte se ve dramáticamente reducida a su mínima expresión y hay que arreglárselas sola, más sola que nunca. No me puedo quejar mucho, porque he hecho grandes amigas acá y porque mi novio venía con la familia de su mejor amigo incluida, tons tengo pelambres entre chicas y domingos familiares. Pero igual nunca es lo mismo, porque el quedarse sin red de apoyo te da la oportunidad de partir un poco de cero y eso es bueno porque puedes ser un poco quien quieras y es malo porque te quedas sin material para tallas internas y, más que todo, sin poder gritar HELP! clamando para que la carga de la brigada ligera venga en tu ayuda cuando lo necesitas, pues están en otro país (el suyo).

La reflexión no es gratuita, es más bien producto de un fin de semana de locura total que parte el viernes con alaridos de mi novio por dolor en el estómago. Hay que establecer que mi novio NUNCA se enferma, tons verlo retorcerse del dolor era cualquier cosa menos normal. Decidí llevarlo a la guardia del hospital más cercano y después de largas y vomitadas 4 horas de observación los doctores anuncian que TIENE APENDICITIS!!! y que lo van a operar.

Cómo podría yo expresar lo mucho que me morí de susto en ese momento? Por ahí sirve comentar que mis ojos se llenaron de lágrimas cuál dibujo animado, pero me las tragué de vuelta para ponerme toda profesional y acribillar al doc con mil preguntas de lo que había que hacer y lo que tenía que traer. Y después de hacerme la bacana con los doctores salgo al patio a llorarle vía telefónica a M1 porque mi novio está con una tripa que le revienta y yo no tengo a mi mamita linda para que me diga que todo va a salir bien o a Felicity para que me traiga café y me cuente cosas graciosas evitando que sucumba ante el pánico. O por último a la madre de mi novio, para que ella tenga que leer y firmar el consentimiento informado, donde básicamente te dicen que el novio se puede morir en la mesa de operaciones, todo expresado de la manera más tétrica posible.

Tipo 22 horas figuraba todavía sin almorzar y esperando noticias de mi novio, quien estaba en un quirófano tan menos glamouroso que el de Grey´s anatomy, sin poder evitar lo mucho mejor que me habría sentido con McDreamy consolándome. La fiesta de fin de año de la escuela de crítica perdía mi participación y solo la presencia de Juano y Martu evitó que me muriera de la angustia. La operación salió bien y mi muy anestesiado novio no se da cuenta de mi existencia cuando le pregunto qué necesita. Con cargo de consciencia profundo parto a "dormir" al depto tipo 2 de la mañana, para cerrar los ojos a las 4 y abrirlos a las 7. Partir al hospital para el cambio a la sala de recuperación y comenzar la serie de viajes para comprar cosas, llevar almohada y frazada, cambiar el pasaje, además de sostener la bolsa mientras vomita producto de la anestesia, auxiliarlo con el pis y hacer guardia mientras el joven en cuestión duerme todo el día. Al final era mejor que durmiera porque cada vez que se despertaba estaba sufriendo en mala.

La noche del sábado la pasé ahí, durmiendo en una de las camas no ocupadas (eran 4 en la pieza), siendo odiada por la enfermera cada vez que le avisaba que el suero se había acabado y en la mañana del domingo ya somos amigos con el roommate de mi novio, que también había sido operado de apendicitis y su hermano. En la tarde dormir de verdad en el depto un par de horas, avisar a más gente, coordinar navidad fuera del hogar y preparar el depto para el alta del día siguiente. La dormida en el hospital del domingo fue menos feliz, pues había una sola cama disponible y eso de que la gente duerme bien en una silla apoyada de la cama del enfermo es pura ficción de series de tv. Despertar el lunes con tortícolis, desayunar café con leche para tratar de disimular que sólo conseguí cerrar los ojos por unas dos horas y pensar en lo raro que era estar un 24 de diciembre en otro país (suelo viajar para las fiestas), en un hospital y con mi novio tajeado en el estómago.

Después de una pequeña crisis ante la posibilidad de que el alta recién se concretaba el 27 de diciembre y la celebración de la navidad se llevara a cabo en el hospital, llegó el jefe de cirugía del lunes y despacha a todos (incluido el socio que llegó el sábado en la mañana a ocupar mi cama). Y abrazos y "felices fiestas" para todos, que nos vamos del hospital, mi novio y yo, los inmigrantes chilenos en baires.

Lo bonito de todo? Que la salud en baires no discrimina al inmigrante y que todo salió gratis.

lunes, noviembre 26, 2007

Me robaron un año...

o por lo bajo seis meses.

cómo es esto de que se acaba (acabó) el año?; mi segundo año en baires, mi segundo año de la maestría, mi segundo y último año en el amante (aunque bueno, gracias a los dioses tan último no es porque me quedaron cursos pendientes porque no sólo de lacan y benjamin vive [y resiste] esta mujer).

cómo fue que llegué hasta acá? porque si me preguntan a mí, recién ayer llegué a vivir a baires, siendo ayer abril de 2006. pero no, resulta que estoy terminando mi segundo año acá (que ok, estríctamente hablando no han sido años completos con mi laaaaaaaaaaaaarga estada en chilito el año pasado, las vacaciones en tierras locales y mi tour europeo julio-agosto). pero es mi segundo año de la maestría y se supone ya estoy con miras a terminar esto y hacer mi tesis. no puedo más que citar a uno de mis placeres culpables: "perdona si me río".

insisto, dónde están esos dos años? a dónde se fueron?

pensando sólo en 2007 no tengo consciencia de abril-mayo, meses consumidos por el bafici y la búsqueda de depto. con suerte recupero una semana. y nos mudamos al depto a fines de mayo, pero resulta que todavía no termino de decorar. y lo que es peor, de ordenar mis cosas.

dónde está junio? porque no me acuerdo de junio ni un poco. y aquí entre nos, sólo tengo ciertos recuerdos de septiembre. si no fuera porque vino mi hermanita ni lo habría registrado.

las cortinas que traje de chilito en agosto están ahí, sin el dobladillo que necesitan para ser colgadas (las del living están improvisada e indignamente dobladas con alfileres de gancho) y si voy a cruzar los andes de vuelta en menos de un mes, no hay forma de que consiga hacerlo.

por favor! no me hagan hablar de 2006 que ahí sí que no tengo forma de recuperar meses que pasaron tan veloces que no alcancé a acostumbrarme a la vida acá sino hasta diciembre, cuando estaba repartiendo galletas de navidad a mis amiguitos argentinos y tomando el bus de regreso a chile para llegar a cocinar la cena del 24 a la casa de mis padres.

sólo tengo consciencia del tiempo por la necesidad tremenda de ver a mi familia y amigos; pero a estas alturas yo debería saber y hacer mucho más de lo que sé y hago. además, estrictamente hablando, a mi sobrino puedo llegar a extrañarlo después de cinco minutos.

y bueno, a eso se suma que el próximo cumpleaños se apagan 29 velas (si es que todavía soplo) y yo recuerdo como si fuera antes de ayer mi felicidad por recibir mis 26 con mega fiesta en local alquilado.

tons rectifico: me robaron tres años!!!!!!!

miércoles, noviembre 07, 2007

Le amo

Con ustedes, The Pie-Maker:

También conocido como Lee "el hombre que se robó mi corazón" Pace.

Para los que se han perdido la nueva razón de existir de cualquier ser humano que se diga amante de las buenas series, esta temporada en gringolandia abc estrenó Pushing Daisies, donde mi adorado Lee hace las veces de Ned, un bellísimo y dulce hombre que tiene la capacidad de revivir a los muertos al tocarlos y devolverlos al estado six feet under si los toca de nuevo. Y esto no sería más que anécdota sino fuera porque revive al amor de su vida y no puede volver a tocarla!

Y bueno, la serie es un montón de cosas más, con una adorable estética a lo Tim Burton, donde sin embargo todo pasa a segundo plano cuando este hombre sonríe.

Nada que hacer: le amo!

martes, octubre 30, 2007

Atlántico: Check!



Uno de mis subplanes del plan Baires era conocer el Atlántico. Me alegra informar que el objetivo fue alcanzado.

Con el Atlántico nos conocimos en un viernes de lluvia torrencial y nos volvimos a ver la noche siguiente. No metí mis pies en él sino hasta el domingo y aunque es igual de frío que el Pacífico, fue uno de los momentos más felices del año.

(Foto: Pinamar, octubre 2007)

jueves, octubre 11, 2007

Amanecer



La última vez que el amanecer me pilló caminando por la calle fue en París.


Volvíamos al estudio de mi hermanita bella y estábamos muy cansadas. Yo, de haber bailado como loca música techno que dejaba mucho que desear pero que se compensaba con el hecho de que hace años que no la revivía (y bueno, que era re ondero estar ahí, en París, en una estación de subte convertida en discoteque bailando). Ella, de haber perdido las ganas de bailar desde las 3:00 de la mañana y tener que aguantar hasta las 5:30 pues su hermanita menor era feliz.


Caminamos hasta el subte y nos tomamos el tren que iba rumbo a su hogar (estación Pere Lachaise). Ella trató de dormir un poco en el trayecto y yo volvía a mirar (era mi segunda amanecida en la ciudad), emocionada, ese París que empezaba a despertar, tan cinematográfico y personal al mismo tiempo.


El amanecer del domingo me pilló con mis amigas M1 y M2 caminando por las calles de Gonnet, cerca de La Plata (que no es lo mismo que Mar del Plata). Habíamos ido a la fiesta de clausura del Festi Freak y el plan de tomar un taxi de vuelta se transformó en una odisea de proporciones temporales cercanas a las dos horas, donde casi nos volvimos locas con la espera pero nunca estuvimos ni cerca de matarnos. M1 estaba colgada a su celular tratando de contactar a la central de radio taxis que no nos había ido a buscar, yo corría como poseída (por la desesperación, si me preguntan a mí) de una esquina a la otra tratando de conseguir un remis, mientras M2 continuaba en el estado de trance por agotamiento que nos había motivado a irnos de la fiesta.


Después de un buen rato de espera asumimos nuestro destino, decidimos reagrupar fuerzas y comimos papas fritas en un localcito que estaba abierto a esas alturas (y ganando clientela gracias a la escasa e ineficiente flota de taxis de La Plata). M2 encontró unas modenas y partimos a tomarnos el micro que nos llevaba a la casa de M1.


En el trayecto de La Plata a Gonnet el sol terminó por alcanzarnos y aunque estaba muerta de frío caminaba feliz. En mi primera visita a la ciudad todo era nuevo para mí y miraba con ojos atentos el camino que me mostraba la famosa Ciudad de los Niños inaugurada por Perón en el 51 y un paisaje que me recordaba a Viña del Mar, pero sin mar.


Para cuando nos bajamos el amanecer ya nos había encontrado y caminábamos muertas de la risa pensando en lo gracioso que debió haber sido vernos desde fuera mientras cruzábamos de una esquina a otra tratando de conseguir un taxi. Yo pensé que quien nos viera habría notado que nunca nos peleamos, pese a los fácil que hubiera sido en esa situación.


Me quedé un rato atrás para sacar la foto y después de hacerlo miré hacia adelante y vi con nuevos ojos a M1 y M2, a mis amigas M1 y M2.


(Foto: Gonnet, La Plata, octubre 2007.)

domingo, septiembre 23, 2007

...




al final no es que cayeran los dioses, es que todos éramos mortales.

y aunque parezca extraño, es precisamente gracias eso que la vida deja de ser un imposible.


(Foto: Cementerio Pere Lachaise, París, septiembre 2007)

domingo, septiembre 02, 2007

For reasons unknown



I pack my case
I check my face
I look a little bit older
I look a little bit colder
With one deep breath
With one big step
I move a little bit closer
I move a little bit closer


For reasons unknown
I caught my stride
I flew and flied
I know that if destiny's kind
I've got the rest of my life
But my heart, it don't beat
It don't beat the way it used to
And my eyes, they don't see you no more
And my lips, they don't kiss
They don't kiss the way they used to
And my eyes don't recognize you no more
For reasons unknown
For reasons unknown


There was an open chair
We sat down in the open chair
I said if destiny's kind
I've got the rest of my life
But my heart, it don't beat
It don't beat the way it used to
And my eyes they don't see you no more
And my lips, they don't kiss
They don't kiss the way they used to
And my eyes don't recognize you at all
For reasons unknown
For reasons unknown


Said my heart, it don't beat
It don't beat the way it used to
And my eyes don't recognize you no more
And my lips, they don't kiss
They don't kiss the way they used to
And my eyes don't recognize you no more
For reasons unknown
For reasons unknown
For reasons unknown
For reasons unknown

The Killers, For reasons unknown.


(Foto: Fugit Amor, Musée Rodin, agosto 2007)

miércoles, agosto 01, 2007

Europa: Check



Me lo dijo una amiga y creo que tiene razón: No hay como la sensación de un sueño cumplido.

En la lista de los pendientes ahora hay un SEGUNDO viaje a Europa.

Ña!

miércoles, junio 27, 2007

Soy una G-R-O-S-A

No es la primera vez que iba, de hecho fue la tercera en dos semanas, pero este lunes partí especialmente temprano a Migraciones decidida a hacer de una vez por todas el bendito trámite de la residencia temporaria. Las dos veces anteriores llegué demasiado tarde, aunque igual el viernes me había levantado a las 6:30 AM, por lo que -aprendida mi lección- en esta ocasión estaba en la fila a las 7:30 de la mañana.

Pero llegar cuando todavía estaba oscuro, pocos minutos antes de que la famosa oficina abriera, no era garantía de nada, pues antes de mí habían por lo menos unas 300 personas (sólo para el trámite del Mercosur, otra cosa es Patria Grande) y el rumor era que sólo se reparten 400 números por día. Entonces, si el cálculo de mi lugar en la fila estaba errado, poco importaría haber dormido míseras 4 horas y estar congelándome in the middle of nowhere (porque el edificio queda cerca de Retiro, pero pasadas las líneas de un tren que no se usa hace siglos, en una suerte de descampado tan poco feliz).

El asunto es que mi puntual llegada sólo me consiguió el número 333 (o C33) en los módulos para tramitar la residencia por Mercosur y mientras el asunto empezaba con el E00 yo me puse a hacer fila en la fila de la fotocopiadora para duplicar los documentos que me habían pedido (duplicados que finalmente no serían necesarios). Después de un rato me di cuenta de que la fila en cuestión no avanzaba ni por si acaso y una niña que estaba más adelante averigua que la fotocopia "por ahí" abría tipo 9:30 (eran las 8 de la mañana) y que la gente de Migraciones no tenía nada que hacer porque no depende de ellos. Muy pacientemente seguí leyendo mi libro mientras me congelaba y pasada media hora opté por seguir los consejos de un guardia y partir a Retiro a buscar una fotocopiadora sólo para enterarme que las dos del terminal estaban malas y que todos los negocios con fotocopiadoras en el perímetro que rodea el lugar abren, también, desde las 9:30. Gracias-gracias. Derrotada volví a la fila original, donde ya había perdido mi puesto y estaba so far away de mi puesto inicial.

Cerca de una hora y media más tarde (ya casi acababa mi libro) y después de una serie de escándalos provocados por personitas que querían colarse en la fila, logré fotocopiar mis papeles y conseguí una silla para esperar por mi turno, que cuando iba a llegar fue puesto nuevamente en espera porque una de las señoritas que atendía encontró que justo cuando tocaba el C33 era momento de dejar pasar a todas las personas con guaguas. Gracias-gracias-gracias.

Finalmente fue mi turno y cuando le entrego los papeles a la niña (que ya me caía mal porque me dijo "señora") me informa que el certificado de antecedentes que había emitido el Ministerio de Justicia argentino estaba malo porque al idiota que me atendió se le había ocurrido mezclar el número de mi pasaporte con el del folio, mutación que no era válida para Migraciones. Después de explicarle gentilmente que no era mi culpa y que no había manera de que ella me obligara a hacer la fila nuevamente al día siguiente, la mina me desafía a traerle el bendito certificado corregido antes de la 1:30, prometiendo que en tal caso me atendía directamente. Terminó su discurso con un muy poco gentil "pero no vas a alcanzar".

Entonces, mientras me aguantaba las ganas de llorar, partí a Retiro a tomarme el subte sólo para enterarme después de 10 minutos de espera que el tren se había detenido en la estación anterior porque algún pelotudo se había desmayado y que el servicio quedaba temporalmente suspendido. Respiré profundamente, maldije al tipo del ministerio y su descendencia, putié en argentino y lloré por tres segundos. Después salí del subte y me tomé el primer taxi que pillé, al cual le pagué con el último sencillo que me quedaba. Entré a la oficina donde se retiraba en dichoso certificado y después de que la gorda fea que atiende me ignorara por 10 minutos, me miró e informó que tenía que ir a la oficina de al lado a alegarle a un señor cuyo nombre retuve sólo hasta que pregunté por él. Obligué al guardia del lugar a decirme dónde estaba la fila para acceder a la maldita oficina de queja y cuando eran las 12:40 mi no paciencia era puesta al límite cuando una señora coreana me preguntaba en coreano dónde tenía que ir a buscar el certificado.

Cinco minutos más tarde estoy frente al hombre que puede arreglar mi día pero me informa que el trámite tarda "al menos 30 minutos" (eufemismo en argentino para decir "para siempre"). Superada, aplico la técnica de "te juro que me pongo a llorar ahora mismo" y él me promete que lo va a hacer lo más rápido posible, que todo sale bien, que el certificado me lo van a entregar, que no voy a perder clases, que al día siguiente no me tendría que levantar temprano y hasta que Chile sale campeón de la Copa América. Vuelvo a la oficina de la fea y 10 minutos más tarde tengo mi certificado en la mano. Corro por Tucumán en dirección a una fotocopiadora (que cerró justo después de que yo saliera) y me subo a un taxi que anuncia que sólo acepta sencillo. Le digo que bien por él pero sólo tengo 50 pesos y DEBO llegar a Retiro ahora-ya! tons mejor que se ponga en marcha. Arreglo los papeles en el taxi, le pago, recibo vuelto y me pongo la chaqueta en un solo movimiento mientras me bajo y corro a la entrada antes de que cierre Migraciones.

Llego donde la mina que me atendió antes y frente a su cara de sorpresa no me queda más que decirle "al final alcancé, que bueno, no?". La mina toma mis papeles y me dice que está todo bien, pero me pregunta en mala: "Trajiste los 200 pesos que hay que pagar?". Yo continúo con mi sonrisa y le digo que sí, que no se preocupe y me manda al siguiente trámite. Me siento a esperar que me llamen y cuando miro el reloj veo que recién es la 1:15.

Salí de Migraciones cerca de una hora y media más tarde con mi residencia temporal en la mano, y aunque no conseguí salir bien en la foto me digo a mí misma: misma, eres una grosa.

viernes, junio 15, 2007

Lo que más extraño



- Sacarnos fotos con mi amigas, acción que produce un cambio de switch donde todas hacemos poses, ponemos caras y olvidamos todos los pudores. Me gusta competir con la Lina sobre quién puede congelar más rato una sonrisa y que el resto se ría de eso.

- Jugar con el Nico a balancearlo y que me pida hacerlo de nuevo aunque yo esté cansada. Me gusta saber que puedo negociar con él para que lo balancee una última vez y que quedamos amigos igual.

- Ir a comer sushi con la Mono.

- Abrazar a mi mamá cuando está en la cocina y preguntarle si me va a extrañar cuando me vaya.

- Que me diga que no, porque está contenta de que yo me esté realizando al estudiar en Baires.

- Hablar horas de horas con el Zombie sobre cualquier película y darnos cuenta de lo lateros que somos.

- Conversar con la Panchita muy tarde en la noche, cuando me saco la pintura y nos lavamos los dientes.

- Contarle a la Icha que me cae mal alguien y que lo odie conmigo.

- Los chistes fomes de mi papá.

viernes, abril 20, 2007

Santiago


En pleno Bafici mode, donde por primera vez en tres años tenía cierta capacidad de distinguir entre aquello que se debía o no ver, llegué por recomendación de uno de mis profes de EA a ver Santiago, documental de uno de los hermanos de Walter Salles.

Santiago es un documental de João Moreira Salles, que nos muestra uno de los personajes más encantadores del cine: quien fuera el mayordomo de su familia. El director filmó las imágenes en 1992, cuando comenzó este proyecto que no vería la luz sino hasta el año pasado. La película es una suerte de ensayo de cómo debería hacerse el documental que estamos viendo al mismo tiempo que el descubrimiento -por parte de nosotros y del director- de este ser bello tan lleno de historias como las miles de páginas que el mismo ha redactado sobre la “Historia de la aristocracia antes y después de Cristo”. Santiago escribió con su máquina la vida y obra de familias reales de Europa, África y más, junto con algunas anotaciones de actores y actrices de Hollywood y otros personajes notables. Y Santiago no dudaba en escribir que se trataba de traidores cuando así era el caso.

Antes de ver esta película yo llevaba un buen tiempo quejándome de la poca capacidad de conmoverme que tenían las cintas que veía en los últimos años. Y digo antes porque esta película me emocionó hasta los huesos, haciéndome llorar como no lo hacía hace ya siglos. Y si se pone en contexto llorar en el Bafici no es fácil porque su público es exigente, no come cabritas (o pochoclo) en las salas, distingue a la perfección una cinta malaya de una filipina (o al menos eso le gusta creer) y te manda a callar incluso si estornudas muy fuerte. Entonces estoy ahí, viendo esta película que me ha conmovido hasta las lágrimas, las dejo salir arriesgando mi integridad y cuando me doy cuenta que las mangas de mi chaleco no serán suficientes, decido ponerlo entero al final de mi barbilla para que las lágrimas vayan a morir ahí.

Santiago anuda las pilas de la historia de la aristocracia con cintas rojas traídas de París. Así de exquisito es, en todo sentido. Y el documental busca una manera de hacerle la justicia que no pudo hace 15 años cuando el director no fue capaz de articularlo en la sala de montaje, pero se queda corto y da cuenta de ello, cuando João Moreira Salles muestra en negro el audio en que Santiago le pregunta si puede hablar de su condición de ser maldito y él le responde que no es interesante.

Santiago conmueve porque es un ser de otra época y me conmueve porque a través de él hice las paces con mi Tata. Porque mi Tata y Santiago tienen muchos puntos en común, como ser inmigrantes, como no terminar de estudiar, como ser autodidactas, como saber la historia del mundo y como no ser ya parte físicamente de él.

Entonces estoy en la sala de cine llorando porque Santiago ya no está y porque mi Tata tampoco, y ambos son este recuerdo bello que cuesta tanto articular. El consuelo se encuentra en saber que existieron y que de alguna forma los conocí a los dos. Una vez más señores el consuelo está en el cine como vida y en la vida como cine.

viernes, abril 06, 2007

Baires versión 2007 (o el largo camino a la segunda casa)


Alguna vez han tenido un sueño en el cual viajan a un lugar y se les queda todo? Bueno señoras y señores, esta jovencita experimentó el sueño en la realidad y fue MUY poco agradable.

Mi venida a Baires se había pospuesto ya varios días porque no tenía depto donde quedarme y porque mi stress pre viaje llegaba a tales niveles que por el bien de mi complexión facial opté por viajar el martes 27 de marzo. Y uno supondría que si el viaje se atrasa se cuenta con más tiempo para hacer las maletas... permítanme decir JA! Empecé con las maletas el lunes (ojo que antes igual medio había agrupado mis cosas) y terminé casi al borde del llanto el martes a las 13:55, cuando el señor del transfer consideró que adelantar el horario en que me iba a buscar sería excelente idea. El tema es que guardé como pude lo que tenía a mano, dejé el mayor desastre del mundo en el living de la casa de mis padres, no pude ni emocionarme al decirle adiós a mis seres queridos y terminé por armar las maletas en el aeropuerto (ojo que no era la única).

Y aunque logré tranquilizarme y la gente de Gol fue de lo más linda al ignorar los cerca de 10 kilos de sobrepeso de mi equipaje, el vuelo fue una versión latina del vuelo de Lost, pero sin ningún Jack que viniera a mi rescate. El avión estaba re vacío y al otro lado del pasillo una señora dormía y la otra leía, mientras yo pensaba "acaso esta gente no se da cuenta de que vamos a morir?!". El avión se lo saltó todo y ojo que digo saltar porque decir turbulencia es un eufemismo en este caso. Pasé todo el vuelo apretando el asiento con una mano y con la otra me echaba viento para evitar vomitar ahí mismo. Cuando estábamos por llegar me porté como la señorita que soy, fui al baño, me tomé el pelo e invoqué a Munra. Muy poco feliz.

Al final llegué y viva (porque chupalla que temí por mi muerte). El panorama seguía sin ser muy feliz porque mi novio había alquilado en un hostal medio del terror, donde a la mañana siguiente fui atacada por la ducha a dos bandas: se cayó literalmente en mi cabeza y había sólo agua hiper caliente porque la fría no funcaba. Se arregló más tarde cuando nos cambiamos de pieza y mejoró mucho más cuando nos mudamos al depto nuevo al día siguiente. Está re bien ubicado, al lado del obelisco, por lo que ahora me voy caminando a mis clases en El Amante. Nos quedamos ahí hasta fines de mayo y la próxima semana empieza la búsqueda del depto definitivo.

No me estoy quejando de nada, sólo me pareció gracioso comentar mi muy accidentada llegada a Baires, jejejeje.

domingo, febrero 25, 2007

Me gané Fondart!!!!!!


y dejo atrás los "problemas reales" de mi estada en baires.

es tan feliz saber que alguien cree en uno y que por eso te dan la plata para que puedas estudiar tranquila.

me gané fondart!!!!!!!! y me creo la muerte porque soy uno de los 26 proyectos seleccionados de un universo de 75.

ven? este 007 soy toda una james bond y ya estoy matando.

miércoles, enero 10, 2007

¿Por qué?


- ¿Por qué Iván Zamorano me enseña a usar el TranSantiago si el socio hace más de 15 años que no usa una micro o se sube al metro?

- ¿Por qué la publicidad de las universidades privadas apunta a cosas tan absurdas como fiestas taquilleras y usan afiches de profesores rodeados de pingüinos?

- ¿Por qué el reality Fama, de Canal 13, insiste en hacerme creer que apuestan a la danza y el rigor cuando eliminan a bailarines de verdad para dejar en vez a minas pechugonas cuyos implantes no las dejan moverse y las hacen caer como sacos de papas?

viernes, enero 05, 2007

ESTOY DE CUMPLEAÑOS!!!!!!


y quería compartirlo con el ciber espacio!!!!!!!

cumplí 28 y me creo la muerte de mina y joven señorita.

ña!!!!!!!!